Existencia...

Sentí tu aliento y tu respiración,
tus manos, recibieron mi calor
y mi abrazo, acarició tu cuerpo...
Te envolví de mi Paz...
Y sin decir nada,
besé tiernamente tu mirada...
Con el tiempo he ido aprendiendo
a estar en ti, incondicional y sincero.
Tus ojos brillantes como gemas
traicionan al corazón...
Y tus labios de miel, niegan el beso anhelado.
El silencio reina, y tu presencia alegra mi existir

Madre

Madre, en silencio te observo...

empacando tus ropas, los regalos

vas preparando el regreso...

Mis lágrimas confunden este minuto.

Compañera de estos días de crisis

has iluminado con tus manos

mis momentos de incertidumbre y dudas.

Gracias por todos los sabios consejos

y por los momentos en que reinó el silencio.

Gracias por secar una vez más mis párpados

y acariciar mis cabellos, mientras

me cobijé en tu regazo.

Mi raíz en tus besos

Cual viejo árbol, mi raíz se afinca en los campos de tus besos lejanos

He seguido en el silencio... esperando oir tu voz...

Un teléfono mudo, asi lo certifica... Llamadas sin respuestas.

No imaginas cuanta alegría y paz logras inyectar

cuando a veces te compadeces de mí...

Y respondes.

Silencio

Silencio verde, frondosos arboles milenarios
trinar de agradable sonido, contrastan
con la ausente paz del largo camino sin ti.
Inquieto busco encontrar algún indicio de sosiego
Sumido en este papel arrugado sobre el cual
plasmo tu ausencia enmudecida e inesperada
En la lejanía otros lugareños
solidarios en su travesía, mantienen silencio
solo observan a este soñador errante y enamorado
El cielo salpicado de algodón y la brisa marina,
traen los recuerdos de tu isla cubana inolvidable.
me gustaría escuchar tus historias
tomar tus manos, secar tus mejillas, salvarte del ahogo,
del encierro, de esa pena escondida, ahora sin la cuna
que te cobijó, por algunos días, sin haber nacido caribeña.
Es la vida, que nos hace llegar tarde a algunos encuentros.
Nutre tus recuerdos de magia, yo seguiré atento...

Pocahontas

Piel morena envuelta en tela sensual
Ojos brillantes, que iluminan como gemas
Cabellos azabaches misteriosos
Actuación como siempre, impresionante.
Hay magia en el ambiente, notas la presencia
Observas como yo sólo sé entender
Nadie se percata, más todos se deleitan.
Te desnudo con mis pupilas, cubres tus rodillas;
Anhelo un abrazo de ti, toda... Más un
Silencio obligado, calma mi sed de tus labios...

Bendiciones, buen viaje...

Sin tu Canto

Canto nocturno que a mis oídos no llegó,

sin aviso, desapareció tu voz esta noche

caminé desorientado, buscando tu rostro

en las riberas del lago azul,

mientras los sauces solidarios,

lloraban también mis penas.

Ahogo incierto en mi garganta

ahora sin saber de tu partida

y mucho menos si habrá un regreso.

Seguiré en la soledad de tu voz

y en la orfandad de mi teclado...

me pregunto, musa mía

A quien escribiré,en tu ausencia ?

Tu beso, que no olvido

Ya no puedo seguir fingiendo.
Me pregunto:
Si dejarás que ésta, tu ausencia
siga matando los sueños sin ti...?
Me trepo en tu guitarra para acariciar tu rostro
y beber de tus palabras y tu risa,
la miel que me niegan tus labios.
Poetisa, potra zaina, que condenas mi alma
no destruyas mi mente de tanto amarte
en esta agonía, sin tus abrazos...
Tu beso de ayer irradió la magia en mi epidermis.
Me quedo en la esperanza... de tu próxima visita.

Abrazado en tus notas

Por los días por venir,
Por tu abrazo en la guitarra
Para que me des tu vida, en una noche…
Así me voy quedando en la agonía interminable
De un momento que no existirá, sino en mis sueños.
Deleite inigualable me causa tu dulce voz,
Siento que me buscas en la multitud, y aunque no sea cierto
Yo voy en busca de tu rostro, observo tus labios,
Y hago mía cada estrofa de tus lamentos.
Si supieras cuanto deseo un momento junto a ti
Y no imaginas cuando alegra estar a escondidas
Tan cerca del silencio que aturde mí vivir
Que no hago otra cosa que sentarme en los pies
De tu mirada, mientras tus manos se deslizan
En los cabellos de una princesa, que también te nombra.

Siempre, eres mi primavera

Primavera has sido siempre en el jardín de letras
que conjugadas en todos sus tiempos
son presentes, de un pasado no muy lejano
en el futuro incierto de nuestros besos.
Luna de estrella fugaz, que se niega a la oscuridad
y que aún en este silencio puedes leer mi pensamiento
Te regalo cada flor que del camino recojo con amor
en cada pétalo escribo un nombre...
el nuevo con que bauticé tu amor imposible.
Me cobijo en Tribeza, y Lyneve me deja su aliento,
de ellas me queda su aroma y sus cabellos negros
que como tus lindos ojos no huyen de mi mirada.
No pueden huir, porque estás en mí...
Como las uvas en el racimo,
juntas, apretadas, acariciando, tomadas de la mano.
Para formar una pirámide de sabor...
Comería una a una las uvas de tu cuerpo
Comenzaría por los pies, subiendo en la epidermis
de tus piernas y bajo tus enaguas me quedaría hundido,
subiría para saciar mi sed de tus pechos
y jugar en tu cuello, mientras mis manos desgranan las uvas
de tus cabellos, que alborotados ríen de mis canas.
Y tu jadeante e íntegra, me regalas tus abrazos desnudos
en el punto máximo de tu calor junto a mi lecho.
Gracias por ser especial...única e irrepetible
Tribeza de mis sueños, dulce encanto de mis oídos
tierna magia de un despertar inalcanzable.

Lo que no fuí...

Me hubiese gustado haber sido poeta
Para escribir todas las noches de luna llena,
Jugando a vivir experiencias ajenas
Y luchando por vivir historias nuevas
Me hubiese gustado haber sido poeta
Para mirar al mar como doncella bella
Abrigándome entre sus olas
Cantando junto a las estrellas
Me hubiese gustado haber nacido como tu, poeta
Para publicar tanta maldad negra,
Para estar junto a mí pueblo
Cantando una canción nueva
Quisiera morir como tu, poeta
Para dedicar lindas palabras,
De amor, de alegrías y de entrega
A tantas almas olvidadas
Quisiera que me recuerdes como un poema
Que solo te queden mis miradas buenas
Que olvides todas mis maldades feas
Y que no olvides nunca,
Que fuiste mi primavera.

( Escrito por Tribeza Lyneve )

No merezco tu ausencia

Cuando apretaba tu cintura en la melodía de un baile,

susurré a tu oído que ese día moriría feliz...

Reiste de mi comentario,

Es el mismo que usas siempre ?... Preguntaste.

Sonrojado quise retirar lo dicho...

Más... un silencio sepultó mi mirar

Y hoy despues de tantos meses

que contados en días, suman cuatrocientos y más

Confieso que huyo de la muerte,

más bien anhelo otro baile,

quisiera sentir los latidos apresurados de tu pecho

y el frio que corre por la palma de tu mano

en la espiritualidad del contacto con la mía.

Quisiera que tus cabellos vovieran a jugar en mi rostro

para que impregnes tu aroma en mi piel

y asi, seguir viviendo en tu ausencia

que no merezco.

sin tí

Sigues en mi

Trovadora de azabaches trenzas, ausente estoy
pero no he olvidado tu canto... ni tu risa
Tu voz continúa sonando en mi barcaza
ahora que los remos me han distanciado
de todos , incluso de ti.
Te sigo llevando en mis viajes
voy descubriendo otros mundos
y tu canto me acompaña, me llena y me inspira
Espero el deshielo polar, para atracar
en las riberas de tus ojos,
esperando buena marea
para anclar cerca de tu respirar