El payaso triste

A Tribeza de San Valentin

No tienes tiempo de mirar en la profundidad de mis ojos...
Nunca detienes tu andar, me dejas extenuado,
sigo tus pasos, trato sin resultados de buscar tu mirada.
Sabes de mi existir, no obstante, huyes
dejas que la busqueda sea más dulce en esta espera.
Y dejas la blancura de tus perlas, en esa risa que me esquiva.
Notas la presencia de mis ojos.
No en tu cuerpo, quiero ir más allá
intento registrar tu pensamiento infinito.
debajo de los azabaches que caen sobre tus hombros
Pero siempre incesante me dejo estar
busco sin agonía , no hay prisa, sé esperar.
No pudiendo más con el desprecio...
con lo avanzado de la tarde
te dejas ver de la única forma que te he amado.
En silencio... Con mi mirada.
Ayer por la noche no solo volví a besar tu frente,
en el ritual de costumbre, con respeto,
por ti, y por quienes te rodean.
Pero el todopoderoso se ha congraciado con este payaso triste,
dejas que por primera vez te tome en mis brazos,
ahora conoces muy cerca la suavidad de mis manos.
Me siento grandioso, te digo al oído,
hoy puedo morir feliz. Ries.
De verdad, descansaría en Paz,
dentro de la maleta de madera que me ha de llevar a la próxima cita.
Danza infinita y robada.
Mil veces soñada y hoy lograda.
Sumido en ese éxtasis que me produce la droga
musicalme entrego intenso en el mismo respeto
de seguirte añorandomientras en mi interior
el payaso triste deleita su silencio.
Buenas noches de abrazos...
Gracias por el tuyo...
Te sentí cerca de mi corazón,
Sentír tus respiros, me deja tu aroma y me regalas
por primera vez a escasos centímetros de mi rostro
La más dulce sonrisa que de ti, he recibido.
Dios te bendiga...
Quizás mañana el payaso pueda volver a sonreír.
Tu serás culpable, Gracias por esos instantes.

Berlín-Alemania- Enero 2005
Basado en un òleo del Artista chileno Aliro Delgado F.